En la era moderna de la concienciación sobre la salud y la forma física, el entrenamiento personal se ha convertido en una tendencia en rápido crecimiento. En el marco de los gimnasios o a través de entrenadores personales autónomos, este servicio está ahora al alcance de cada vez más personas. Existen numerosas razones por las que alguien puede optar por recurrir a un entrenador personal. Este artículo presenta para quién es una buena idea una supervisión tan estrecha.
Índice de contenidos
¿Qué es el entrenamiento personal?
El entrenamiento personal es un enfoque individualizado de la forma física y la promoción de la salud. Los particulares pueden contratar un entrenador personal para recibir atención individualizada de un profesional formado en el campo del fitness.
- A diferencia de las clases regulares de fitness o del entrenamiento independiente en un gimnasio, el entrenamiento personal hace especial hincapié en las necesidades, objetivos y requisitos previos específicos del individuo.
Esta atención 1:1 permite al entrenador personal asegurarse de que los ejercicios se realizan correctamente, crear planes de entrenamiento individuales y motivar y asesorar al cliente para que consiga resultados óptimos en cuanto a forma física, salud y bienestar.
Hace décadas, estos entrenadores individuales a menudo sólo estaban al alcance de atletas profesionales o personas adineradas. Entretanto, los entrenadores personales se han generalizado y, por tanto, también ofrecen precios más bajos que hacen accesible el servicio a los particulares normales.
¿Para quién es adecuado un entrenador personal?
Los entrenadores personales suelen trabajar de forma independiente o como empleados de un gimnasio. Los interesados pueden reservar sus clases individuales a través de este proveedor o de una plataforma en línea como fixando.com.do o fixando.es. Quienes estén pensando en hacer esta inversión pueden encontrar aquí más información sobre si el servicio les merece la pena personalmente:
- Fitness principiantes
Para los principiantes en fitness, empezar puede resultar abrumador. Con la variedad de equipos, ejercicios y métodos de entrenamiento, es fácil sentirse perdido. Aquí es donde entra en juego un entrenador personal: puede enseñar a los principiantes los conceptos básicos del entrenamiento, familiarizarlos con el equipo y asegurarse de que los ejercicios se realizan de forma correcta y segura. Así se minimiza el riesgo de lesiones y se crea una base sólida sobre la que seguir trabajando en el futuro.
- Personas con objetivos concretos
Ya se trate de perder peso, desarrollar la musculatura, correr una maratón o prepararse para una ocasión especial, los objetivos específicos requieren planes de entrenamiento específicos. Un entrenador personal puede generar precisamente ese plan personalizado, adaptado a los objetivos y necesidades únicos de cada persona. Con su experiencia, los entrenadores pueden garantizar que el tiempo en el gimnasio se aprovecha al máximo y los resultados se ven en el menor tiempo posible.
- Personas con restricciones sanitarias
Para las personas con problemas de salud, como enfermedades cardiovasculares, diabetes o problemas ortopédicos, el ejercicio puede resultar difícil. Un entrenador personal con conocimientos de rehabilitación puede elaborar planes de ejercicio que no sólo sean seguros, sino que también ayuden a mejorar o estabilizar la situación de salud. Si una persona tiene dificultades para realizar ejercicio con regularidad, pueden modificar los ejercicios para adaptarlos a la dolencia y ayudar a mejorar la calidad de vida.
- Deportistas y entrenadores avanzados
Incluso los atletas experimentados pueden beneficiarse de un entrenador personal. Un entrenador puede introducir nuevos métodos de entrenamiento, mejorar el rendimiento e identificar los puntos débiles que pueden mejorarse. Gracias a sus conocimientos avanzados, pueden ayudar a los deportistas a superar estancamientos, perfeccionar la técnica y prepararse eficazmente para competiciones o eventos.
- Personas que necesitan motivación
Todo el mundo conoce esos días en los que el sofá parece más tentador que el gimnasio. En esos momentos, un entrenador personal puede actuar como motivador y responsable. A través de citas periódicas y recordatorios de los objetivos fijados, el entrenador puede ayudar a mantener la motivación alta y mantener al cliente en el buen camino para lograr sus ambiciones de fitness.
- Personas con tiempo limitado
Las personas que tienen una agenda muy apretada, o que sólo tienen la oportunidad de hacer ejercicio en momentos en que los gimnasios habituales no suelen estar disponibles, se benefician de un entrenador personal. Pueden ofrecer entrenamiento a las horas exactas que convengan a sus clientes.
Los costes del entrenamiento individual suelen ser algo más elevados que los de los cursos en grupo o las cuotas de los gimnasios. Sin embargo, para los grupos de personas aquí mencionados, puede merecer la pena realizar este gasto para aumentar así el bienestar y la salud propios.
Conclusión
El entrenamiento personal ha pasado de ser un servicio exclusivo para atletas profesionales y personas adineradas a convertirse en una opción accesible para un amplio sector demográfico. Ya se trate de principiantes que quieren iniciarse en el mundo del fitness, de personas con objetivos específicos o problemas de salud, de deportistas avanzados o, simplemente, de alguien que necesita un impulso motivador o un plan de entrenamiento flexible: Un entrenador personal puede aportar un gran valor añadido en todos estos casos.
