Las autoridades están trabajando para garantizar que la campaña de vacunación contra el coronavirus del país no sufra más retrasos como resultado de la tormenta Filomena, que provocó una nevada histórica en Madrid durante el fin de semana y se prevé que provoque una intensa ola de frío durante la próxima semana.
La ciudad de Madrid quedó paralizada por el clima extremo, con carreteras bloqueadas, servicios de trenes suspendidos y el aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez obligado a cerrar. Las fuertes nevadas también provocaron problemas en los centros médicos, y muchos trabajadores sanitarios y pacientes no pudieron acceder a las instalaciones. Como resultado de los problemas, el departamento de salud de Madrid suspendió el sábado todas las vacunas contra el coronavirus para los trabajadores de la salud, señalando las dificultades de acceso y la escasez de personal.
En el Hospital Infanta Leonor de Madrid, en el distrito de Vallecas, muchos trabajadores quedaron varados por la nieve el sábado, mientras que otros no pudieron llegar al hospital para su turno. Algunos optaron por caminar kilómetros en la nieve para relevar a sus compañeros y, según un portavoz del departamento regional de salud, los jeeps también se utilizaron “para trasladar a los trabajadores de la salud a los centros de trabajo y ayudar a relevar a los compañeros que habían estado trabajando dos turnos seguidos.
El portavoz madrileño indicó que se han despejado los accesos a las unidades de emergencia, argumentando que “si bien todavía hay dificultades en algunos centros, se espera que los problemas se resuelvan en las próximas horas”. El sindicato de enfermería Satse, sin embargo, sostiene que hay algunos trabajadores de la salud en Madrid que no se han ido a casa desde hace tres días.
A pesar de los problemas, la región de Madrid ha dicho que no habrá más cambios en la campaña de vacunación. Un nuevo envío de la vacuna Pfizer-BioNTech estaba programado para llegar en avión al aeropuerto de Barajas de Madrid el lunes. Pero aunque el aeropuerto comenzó a reanudar su actividad la noche del domingo, las desfavorables condiciones meteorológicas hicieron que el cargamento fuera enviado a la ciudad vasca de Vitoria. Desde allí, será transportado por un convoy de seguridad hasta la capital española.
El Ministerio de Transporte de España mantendrá 1.300 quitanieves en nueve de las regiones más afectadas por la tormenta Philomena (Aragón, Cataluña, Cantabria, Valencia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, La Rioja y Madrid) para garantizar que las carreteras permanezcan despejadas. Sin embargo, existe la preocupación de que el frío extremo convierta la nieve restante en hielo, lo que provocará más complicaciones en las carreteras. Once regiones están en alerta por bajas temperaturas, con termómetros programados para caer por debajo de -10ºC en algunas áreas .
Otras regiones que fueron golpeadas por la tormenta Philomena también prometieron mantener la inmunización por buen camino a pesar del clima extremo. En Aragón, un portavoz del departamento de sanidad aseguró que a la comarca no le preocupan los retrasos, explicando que “ya llegaron dosis la semana pasada en zonas del Pirineo con mucha nieve”. Si un envío no puede llegar a un determinado centro de salud de Aragón por el estado de las carreteras, las vacunas permanecerán en el hospital respectivo, que inmunizará a los colectivos de riesgo y residencias mayores de la ciudad.
En La Rioja se adelantó la vacunación durante el fin de semana a pesar de las adversas condiciones meteorológicas, mientras que en Castilla y León, las autoridades aseguran que son las más preparadas para afrontar las heladas previstas. También hubo pocos informes de problemas en Cataluña, con la campaña de vacunación solo suspendida el viernes en las ciudades de Batea y Móra en la provincia de Tarragona y en Lleida. El departamento de salud catalán tiene como objetivo abrir todos los centros de atención primaria de la salud el lunes, excepto en el área de salud de Falset en Tarragona, que permanecerá cerrada por la acumulación de nieve.
El lanzamiento de la vacuna contra el coronavirus, que comenzó a finales de diciembre, se está produciendo a un ritmo desigual en las regiones de España . Hasta el viernes, que puso fin a la segunda semana de campaña de vacunación, Asturias y Galicia habían administrado el 60% de todas las dosis recibidas, frente a Madrid y Cantabria, donde la cifra era del 11% y el 19%, respectivamente.
